España vuelve a ser favorita

Los jugadores españoles vivieron su día más feliz en el Mundial de Sudáfrica y se sintieron de nuevo favoritos tras las dudas surgidas en el comienzo del torneo.
El delantero español David Villa celebra tras marcar el 1-0 durante el partido España-Portugal, de octavos de final del Mundial de Sudáfrica 2010 en el estadio Green Point de Ciudad del Cabo / Efe / Oliver WeikenAficionados de la Selección
Para España la estética y las sensaciones son casi tan importantes como el propio triunfo. Por eso, su comienzo del Mundial generó algunas dudas, y más después de comenzar perdiendo ante Suiza. Pero el triunfo del martes por 1-0 ante Portugal significó algo más que el pase a cuartos de final.
"Vimos una buena España y una gran España en el segundo tiempo", afirmó Xavi. "En la segunda parte estuvimos fantásticos", aseguró David Villa. Y el propio Vicente del Bosque, seleccionador español, agregó: "Si jugamos así, es difícil que nos controlen".
Hasta Luis Aragonés, antiguo seleccionador español y muy crítico en estos días con su antiguo equipo, ofreció elogios: "España es la del segundo tiempo".
La prensa local, tan melancólica en los últimos días, también encontró argumentos para liberar sus emociones. "Esta es mi España", proclama "Marca". Y "As" exclama: "¡Toreros!".
Entre tanto, el diario "Mundo Deportivo" destaca en una fotografía a David Villa con el titular: "¡Genial!" y explica que el nuevo delantero del Barça "firmó un triunfo y alcanzó el pichichi con un golazo en combinación con Iniesta y Xavi.

La prensa extranjera
Una de las notas curiosas en el entorno de la selección española es que la prensa extranjera siempre pareció tener más fe en las opciones de la "Roja" que los propios españoles. Por eso no extraña que el diario argentino "La Nación" de Argentina afirmara: "Más que un triunfo, España eliminó a Portugal y puede sentirse candidato".
Y "El Observador" de Uruguay añade: "España no defraudó". Los jugadores españoles disfrutaron hoy de medio día libre, de unas cuantas horas para liberar tensiones, que fueron muchas.
Mientras tanto, los periódicos europeos elogian al nuevo delantero del FC Barcelona, David Villa y subrayan la actuación "decepcionante" de Cristiano Ronaldo.
En el seno de la selección española hacía tiempo que se pensaba que el partido más importante del Mundial era el de Portugal, un cruce muy exigente para abrir las eliminatorias. Éste debería ser el punto de despegue, pensaba el cuerpo técnico.
El siguiente rival es Paraguay y la opción de hacer historia es ahora más real en la selección española, que intentará el sábado entrar entre los cuatro mejores por primera vez desde 1950.
Es un cruce aparentemente muy favorable para la "Roja", pero sus jugadores no quieren ni oír hablar de ello. Su filosofía es la misma que hace dos años les permitió ganar la Eurocopa: "Ir paso a paso", como afirmó Casillas tras el triunfo ante Portugal.
O como siempre dice Del Bosque: "Malos deportistas seríamos si no tenemos humildad".
Pero España se liberó. Se quitó un peso de encima, recuperó viejas sensaciones, especialmente en la segunda parte, en la que recordó la esencia de su fútbol con ese juego combinativo que tanta admiración despertó en todo el mundo.
Porque para España el fútbol no es sólo cuestión de triunfos, sino también cuestión de estética.