jueves, 1 de julio de 2010

Guerra germano-argentina antes del partido


A medida que se acerca el duelo por cuartos de final entre Alemania y Argentina, las fuertes declaraciones previas van en aumento y lo señalado el miércoles por el germano Bastian Schweinsteiger, se sumó este jueves su compañero Philip Lahm.
El jugador de Bayern Munich y capitán de la selección teutona avivó la polémica al afirmar que los trasandinos son malos perdedores.
"Sabemos que los sudamericanos son impulsivos y temperamentales y que no saben perder", dijo el lateral después de defender a Schweinsteiger, que afirmó que los argentinos son unos provocadores y que esperaba que el árbitro supiese ver quién provoca a quién.
"El sábado veremos cómo pierden y cómo se comportan después de la derrota", añadió Lahm sin mover una ceja en la rueda de prensa posterior al entrenamiento en las inmediaciones de Pretoria.
Sentado junto a Lahm estaba Oliver Bierhoff, ex capitán de la selección germana y actual secretario técnico del equipo, quien añadió que los jugadores de la albiceleste son "provocadores" y "agresivos" sobre el césped.
Alemania eliminó a Argentina en la misma ronda de cuartos de final en el pasado Mundial, en un partido que necesitó la definición a penales.

Respuesta albiceleste

En el lado argentino, el seleccionador Diego Armando Maradona fue el primero en contraatacar y dirigió una pregunta a Schweinsteiger "¿Qué pasa contigo, estás nervioso?", dijo al canal de televisión Fox Sports.
"No tenemos tiempo de pensar en Schweinsteiger. Los jugadores sólo piensan en saltar a la cancha y tomarse la revancha", agregó Maradona en alusión al partido de 2006 en Berlín.
El técnico mostró mucha confianza y aseguró que no piensa en una definición desde los 12 pasos. "No me preocupa lo que digan de los penales, les vamos a ganar sin necesidad de llegar a ellos", dijo.
Otro que habló en los albicelestes fue Martín Demichelis quien conoce mejor que ningún otro argentino a los alemanes, con quienes comparte liga desde hace siete años.
Aseguró que las declaraciones que están haciendo algunos jugadores germanos para calentar el encuentro demuestran su nerviosismo y el respeto que tienen a Argentina.
"Lo que dijo (Bastian) Schweinsteiger es un acto de nerviosismo y de respeto. Nos tienen mucho respeto y más después de que hace tres meses les ganamos en su casa", aseguró el jugador de Bayern Munich, ciudad en la que el 3 de marzo de este año, Argentina se impuso a Alemania en un amistoso por 1-0.
El jugador aseguró que aquella victoria "fue desvalorizada" por muchos, pero destacó su importancia. "Aquella Alemania, con tres cambios, es la misma que le ganó con amplia superioridad a Inglaterra", dijo.
Demichelis quiso restarle importancia a las provocaciones alemanas y se negó a "entrar en polémicas", al tiempo que avisó de que "las respuestas se darán en el campo".

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